miércoles, 5 de marzo de 2008

Los niños: intelectuales en pequeño formato.

Diferentes fuentes e informes nos confirman el progresivo crecimiento del gusto por la lectura. Y es que, las estadísticas dicen que los más pequeños nos están dando una buena lección al tratarse de uno de los sectores con mayor porcentaje de lectores.

Creo que en estas edades, es esencial dejar que poco a poco ellos decidan qué es lo que quieren leer, que sientan la lectura como un entretenimiento o aventura y no como una obligación.

El amplio abanico que ofrece el mercado, metodologías más motivantes y adecuadas a la hora de enseñar a leer, la expansión y mayor accesibilidad de ludotecas y bibliotecas, y la valoración positiva que se tiene socialmente de la lectura; creo que pueden ser algunos de los fenómenos que potencian este incremento. A lo que puede sumarse la posible utilización de las nuevas metodologías para aportar un carácter más lúdico a la misma.

Y es que, la lectura no sólo va a ser una puerta abierta que nos conduce a otros mundos, sino que además, su buen manejo va a condicionar el progreso y aprendizaje posterior. Por ello, es muy positivo que las familias contribuyan a este hecho con el ejemplo, para garantizar crecimiento y enriquecimiento en el niño.